La sociedad siempre estuvo obsesionada y preocupada por aquello que podría venir, a mediano y largo plazo, producto de la ciencia ficción y el futurismo. Así como “2001: Una odisea del espacio” imaginó determinadas particularidades para el nuevo milenio. La década de 1980 y 1990 planteó muchas posibles realidades para el futuro de la humanidad, tanto en libros, series o películas. Hoy en día, varios son los podcasts que retoman estas miradas con el regreso de las estaciones espaciales y las infraestructuras en la luna.
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Aunque los cambios tecnológicos han entrado a la categoría de inevitables, también se mostró que el futurismo es mucho más difícil de lo que parece. Muchas veces se apunta a que las decisiones que se toman son arbitrarias. Un ejemplo es, que hubiese pasado si Henry Ford en lugar de autos a combustible hubiese apuntado a construir autos eléctricos. Seguramente se hubiese llevado adelante un cambio importante en el curso de la historia de la humanidad. Allí entra en juego el descubrimiento del petróleo y cómo se inclinó el hombre en modelar el futuro ante esta nueva mirada de cómo se llevó adelante el actual presente.
Cómo mirar hacia el futurismo
El libro “The Skeptic’s Guide to the Future”, de los hermanos Novella, busca mejorar todo lo que se planifica sobre el futuro. Para ello se hace una identificación de las 10 “falacias” del futurismo. La primera crítica es imaginar una sociedad futurista como la actual, únicamente que con más aparatos para interactuar. Uno de los escritores ha planteado que “no se puede simplemente proyectar una tecnología hacia el futuro, también hay que pensar en ella en el contexto de todas las demás tecnologías que también avanzan durante el mismo período de tiempo”.
Dentro de la planificación de uno de los Novella, entiende que no estaremos viajando en el espacio, dentro de 500 años, como estamos ahora. Si no que, se debe apuntar a unos descendientes genéticamente modificados como cyborg para el viaje espacial. Esto, entiende uno de los escritores, se debe incluir en el cálculo de la mirada hacia el futuro.
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Mirando una historia accidentada
Los escritores del libro sobre la mirada hacia el futurismo creen que hay actividades personales importantes que merecen más atención. Para ellos, no se debe mirar el breve lapso de tiempo y reconocer el momento histórico en el que se vive. Para los Novella, salir de ese centro podría llevar a “perder la capacidad de adaptarte ágilmente a los cambios en la tecnología, a los cambios en la cultura, para tomar decisiones sobre el futuro”. Es por ello que se entiende que la mirada hacia lo que viene debería ser una disciplina académica ante los beneficios que se pueden obtener.
Steven Novella entiende que se han cometido grandes errores por no mirar el futuro correctamente. Los avances no han sabido entenderse, poniendo como ejemplo la transición de lo analógico hacia lo digital, como el modelo de cambios más relevantes de los tiempos. El escritor entiende que nadie supo avizorar o entender el cambio que la tecnología digital traería a nuestra sociedad. Este cambio de juego no se vio venir y ahora llega la duda sobre cómo será la realidad en el final de este siglo y el comienzo del próximo.
