Tecno - TENDENCIAS

La tarta de queso impresa en 3D, una realidad en Columbia

Unos ingenieros de la Universidad de Columbia ya han podido probar la nueva tarta de queso impresa en 3D, que se ha realizado con un total de siete ingredientes. El aspecto de la tarta es casi igual al de una que se realizaría de manera tradicional, con la única diferencia de que se pueden admirar las capas que la forman una a una. Además de eso, la impresora 3D agregó la crema así como las mermeladas que finalizan la receta original.

¿Cómo se hace una tarta de queso impresa en 3D?

Las impresoras 3D para comida son las encargadas de realizar este tipo de diseños, que probablemente, serán muy relevantes para la gastronomía del futuro. Estas máquinas suelen tener las recetas precargadas de manera previa a la elaboración. Algo que facilita que el robot ya sepa lo que tiene que hacer. En el futuro, probablemente, la mayor parte de los platos y postres preferidos de la población sean de este tipo, así que, solo quedará un poco de tiempo más para comprobarlo.

La Universidad de Columbia apostó por una típica “cheesecake”, uno de los postres más queridos a nivel internacional. En las jeringuillas alimentarias de la máquina ellos agregaron una pasta de galleta para formar la estructura base original del postre. También un puré de plátano para agregarle melosidad y una textura cremosa. Y otros elementos como el zumo de cereza o la mermelada de fresa. Antes de crear el prototipo final, ellos (de cuya autoría es la fotografía que te mostramos) hicieron hasta 7 pruebas diferentes. Todo con el propósito de crear una nueva tarta de queso impresa que se asemeje a la real, hecha por manos humanas.

¿Gustarán este tipo de postres en el futuro?

En el futuro, es probable que se utilice este tipo de máquinas impresas para poder elaborar recetas mucho más saludables. Christen Cooper comentó que estas maquinarias seguirán “produciendo alimentos procesados” con la diferencia de que, quizás, algunas personas que no puedan comer dulces puedan introducirlos en su dieta. La “nutrición personalizada” según Cooper será posible dentro de unos años y permitirá un mejor control alimentario sin renunciar al placer de comer lo que a una persona le guste.

Andrew Feenberg, profesor de la Universidad Simon Fraser de Vancouver, comentó que probablemente las impresoras podrán utilizarse en el futuro en restaurantes y cafeterías. Allí, cargarían el software en horas de menor actividad. Algo que quizás no sería del agrado de todo el mundo, al volverse un proceso totalmente automatizado.

Un trabajo matemático perfecto

Antes de llegar a la tarta final, como os comentamos antes, la Universidad de Columbia tuvo que trabajar mucho en pulir su resultado final. El fallo se encontró en el modelo de la impresora, que fue incapaz de completar su trabajo con los polvos alimentarios, creando unas capas pegajosas y no uniformes que se derrumbaron. Aunque muchas personas no lo crean, las formas de la comida 3D ocultan en sí mismas un gran cálculo matemático, que hace que se mantengan estables y con una forma densa. Por ello, las capas han de ser totalmente iguales entre ellas para que el conjunto final resulte todo un éxito. ¿Qué opinas sobre la tarta de queso impresa? ¿Te la comerías?