¿Sabes que la alimentación del futuro podría ser la comida impresa en 3D? Esto podría plantearse así para ayudar a la población de todo el mundo a tener alimentos en abundancia para todos y también para poder producir una gran cantidad de platos sin tener que estar maltratando al medio ambiente, generando una producción mucho más sostenible.
La comida impresa en 3D: una solución para cuidar a la población y generar buenos hábitos
Se prevé que dentro de 30 años no habrá recursos suficientes para cubrir todas las necesidades básicas de los habitantes del planeta. Con esos pronósticos sobre el futuro, es razonable que los especialistas en ciencia y tecnología, así como los trabajadores de la salud, estén buscando alternativas para generar una buena alimentación global.
Todos ellos estarían buscando, en teoría, medidas que ayuden a disminuir las enfermedades relacionadas con la dieta. Algunas de las que querrían eliminar serían la obesidad, la diabetes o incluso las dolencias neurológicas y nerviosas. La comida impresa en 3D sería una opción interesante para promover una dieta vegana, generando alimentos a base de soja. Además de la preocupación por la salud, también habría una fuerte preocupación medioambiental, necesitando recursos que ayuden a producir sin lastimar al planeta.
La industria alimentaria quiere obtener productos ricos y visualmente atractivos, al igual que la comida tradicional
La industria alimentaria estaría realizando investigaciones sobre la comida impresa en 3D para poder realizar alimentos monitorizados. En ellos se podría crear un aspecto determinado, con una forma programada por el equipo técnico, una textura determinada y un valor nutricional recomendado por profesionales de la salud. De esta manera, los alimentos impresos serían más saludables, sostenibles y atractivos.
¿Cómo se preparan los alimentos 3D?
Los alimentos impresos se preparan capa a capa. Primero se programa el alimento, tanto su textura como su forma. Después se introducen los cartuchos que formarán la estructura de la comida impresa. Para imitar un bistec se insertarían los cartuchos de grasa, de sangre y los de «carne» para poder realizar los filetes. El hecho de que se haga capa a capa y de manera horizontal hacia arriba implica una mayor precisión.
Hay establecimientos a lo largo del mundo que ya han probado trabajar con la comida impresa. Es el caso del restaurante «Le Petit Beefbar» de Chelsea, en donde realizan filetes veganos impresos. Estos están hechos con rellenos de soja, maíz y habas. La textura resultante es un pedazo de carne vegetal muy jugoso y apetecible.
En España, concretamente en Barcelona, el restaurante «Cocina Hermanos Torres» también han querido apostar por este nuevo método de cocinado. Aunque ellos elaboran las cremas y rellenos que van a utilizar en la máquina, las formas las realiza la máquina. Así, han llegado a comercializar una crema de trufa impresa en 3D en forma de espiral o postres de chocolate con volúmenes. Aunque ellos se centran más en las formas y no en la construcción 100% de nuevos alimentos, comienzan a introducir esta nueva manera de cocinar.
En Israel, mientras tanto, investigan con la impresión de carne y pescado. La bioimpresora de Steakholder Foods se está posicionando como una de las grandes líderes en la creación de comida impresa gracias a sus procesos y a sus tintas biológicas de laboratorio. ¿Qué opinas?
