Un equipo de investigación del Reino Unido ha trabajado en la creación de una batería AA que se alimentará con algas. Las diminutas celdas de combustibles pretenden producir energía que pueda utilizarse en los actuales smartphones, como otros dispositivos. Luz, agua y algas verdeazuladas son la materia prima para emplear por las baterías.
Los investigadores han planteado que “las baterías dependen en gran medida de materiales caros e insostenibles”. Por ello, estos recolectores son más duraderos y con efectos menos adversos sobre el medio ambiente. El sol, mediante la fotosíntesis, permite que el dispositivo haga la generación de energía para usarse en la alimentación de los microprocesadores.
Batería AA y con bajo costo
Los científicos ejecutaron la prueba de esta batería en un Arm Cortex M0+, en un lapso de 6 meses. Este pequeño chip, de bajo consumo, suele encontrarse a menudo en dispositivos conectados a Internet. La celda fotovoltaica tuvo pruebas tanto en condiciones domésticas como semiexteriores.
Los investigadores buscaron conocer la fluctuación del comportamiento de la batería en diferentes ámbitos. La afirmación más importante de este trabajo es que el dispositivo siempre permaneció prendido. Los encargados del proyecto, en la Universidad de Cambridge, se han mostrado sorprendidos por la consistencia en el funcionamiento del sistema.
Aunque la luz es un elemento clave, para la fotosíntesis, la célula ha continuado funcionando aún en la noche. Para los investigadores, esta situación se da producto de las algas. Allí el proceso se continúa dando debido a la alimentación de las mismas para que el sistema mantenga su funcionamiento aún en la noche.