Cada vez más las bandas criminales globales están utilizando compañías ficticias del Reino Unido para realizar estafas criptográficas por cifras millonarias. Una investigación que está siendo llevada a cabo ha revelado que son más de 150 compañías falsas, con muchas vinculadas a China. Por intermedio de las mismas atacan a personas en línea, en algunos casos le rompen el corazón y en otros vacían sus cuentas bancarias.
Muchas mujeres, principalmente, han sido el foco de ataques online por intermedio de coqueteos y la programación de un futuro juntos. En pocos meses, se da la situación donde se termina la relación rompiendo el corazón de la enamorada. Claro que, esta realidad “sentimental” viene de la mano con la defraudación. Donde, en muchos casos, son todos los ahorros conseguidos a lo largo de su vida. Estamos ante lo que se denomina: sacrificio o matanza de cerdos (pig butchering).
Estamos hablando de una forma de crimen organizado muy elaborada, brutal y en rápida expansión. Esta situación a menudo involucra sindicatos criminales, esclavos modernos y víctimas en todo el mundo. En 2021, saltó a la fama un fraude con estafadores que roban grandes sumas en criptomonedas. La preparación de la estafa se hace al mínimo detalle y ya tiene la atención de la Interpol y el FBI.
Las estafas criptográficas y el Reino Unido
La Oficina de Periodismo de Investigación y el portal Observer han venido llevando adelante un trabajo investigativo. Allí se descubrieron a pandillas mundiales del crimen organizado que tienen al Reino Unido como base virtual para sus operaciones. La investigación apunta a que las laxas leyes de registro de empresas posibilitan la planificación de estos fraudes a escala industrial. Unas 168 empresas británicas fueron acusadas de llevar adelante esquemas fraudulentos con criptomonedas. A esto se suma que más de la mitad de los mismos se encuentran vinculados a diversas estafas de matanzas de cerdo.
El informe plantea que hay docenas de empresas registradas en direcciones donde hasta se han encontrado una tienda vacía. La gran mayoría de los directores de estas compañías cuentan con residencia en China. De todas formas, no parece que exista algún vínculo genuino con las direcciones en las que afirman tener sede.
“Este es un escándalo tan grande como cualquiera de los escándalos financieros que hemos visto en los últimos 20 años”, dice Graham Barrow, experto en antilavado de dinero. “Es un fracaso abyecto del gobierno del Reino Unido no haber hecho nada al respecto”, cerró Barrow. El término “sacrificio de cerdos” proviene del chino “sha zhu pan”, el mismo refiere al proceso de engordar a un porcino para luego sacrificarlo. Estas estafas criptográficas apuntan a víctimas que son preparadas a lo largo de un período prolongado buscando ganarse su confianza.
La nueva realidad
La aparición de las criptomonedas abrió un nuevo mercado para este tipo de estafadores por intermedio de las billeteras virtuales. Por esta vía tecnológica abrió una línea fraudulenta que permite que extraños tomen el control de la misma sin que el estafado se entere. El trabajo consiste en alimentar al “cerdo” y cebarlo, para que luego pueda ser masacrado.
La clave del éxito de estas estafas está en el convencimiento de las víctimas que se encuentran usando una plataforma comercial o billetera virtual legítima. Las víctimas han reconocido que invierten muchas veces por ser empresas del Reino Unido. Caso contrario nunca hubiesen tomado tamaña decisión. El crimen organizado eligió la isla británica al entender que es un “país seguro en términos de criminalidad y corrupción”.